Carlos González Pereira. Diputado por la Asamblea de Madrid en la IX legislatura.
Anteriormente concejal por el PP en Getafe.
La firma de Carlos González Pereira es una
firma ágil, suelta, firme y contundente. Ilegible por rapidez, que no
intencionalmente, puesto que podemos deducir cuáles son sus partes, y rotunda
en la realización de sus gestos.
Está ejecutada en 5 trazos (marcados en
colores por encima para una mejor visualización de los mismos).
- Un trazo (amarillo) que puede ser su
nombre.
- Un trazo (rosa) que seguramente sea su
primer apellido y que es el trazo más fuerte, el que da consistencia a la firma
y en el que se apoyan todos los demás.
- Un trazo (verde) que parece ser su segundo
apellido.
- Un cuarto trazo (azul) que es un subrayado.
- Un quinto trazo (naranja) que es un punto
con el que cierra la firma.
Su mente es rápida, las ideas circulan a
buena velocidad y no pierde tiempo en dar vueltas innecesarias a las mismas.
Cuenta con una buena habilidad para adelantarse a estudiar previamente una
situación y sopesar los beneficios e inconvenientes de la misma. Su forma de
pensamiento lógico, le facilita esa valoración. Una vez realizado este paso
previo, está listo para tomar una determinación. Y, en ese momento, se
posiciona en la misma con fortaleza, seguro de lo que realiza y con una actitud
firme, luchadora y contundente.
A partir de ahí no hay tiempo para las
dudas ni las cavilaciones innecesarias. Desde ese momento predomina claramente
la acción sobre la reflexión.
Es suficientemente claro para mostrarse y
suficientemente hábil para no revelar toda su jugada de una vez.
Si bien su personalidad es firme y fuerte
para defender con contundencia sus criterios, lo mezcla con unas excelentes
dotes diplomáticas. Eso hace que sea capaz de adecuarse a situaciones, personas
o lugares de manera fácil, pues consigue flexibilizarse con naturalidad, sin
ser influenciable ni perder la esencia de sus ideales o proyectos, los cuales,
a pesar de esa ductilidad, están siempre muy claros en su propósito.
En su personalidad hay una rica mezcla de
dureza y suavidad. Aparecen dos áreas bien diferenciadas, pero integradas a la
vez.
En la faceta profesional se posiciona con
fuerza. Ahí asoma su parte rigurosa, autoexigente y combativa. Es firme en lo
que piensa y en la forma de defenderlo. No se deja avasallar si no que impone
su criterio con firmeza, y va hacia sus objetivos con aplomo, coraje y fuerza
para luchar contra los obstáculos que puedan surgir en el camino. Le acicatea
desde el interior, tanto su propio deseo de superación, que es grande, como
que, una vez logrado, eso sea reconocido externamente.
En la faceta personal emerge la otra parte,
la ternura, la calidez y la suavidad de su carácter sensible. Una sensibilidad
muy bien encauzada para que propicie el sentir intensamente sin que le reste ni
un ápice de objetividad y visión justa y sensata. Entre sus afectos aparece la
figura materna como un referente que ha marcado su personalidad y por quien
siente un cálido cariño.
El control sobre sus impulsos es adecuado.
Es precavido y puede luchar y defender sus criterios con arrojo, pero desde la
prevención y la observación de los demás. Su carácter es más controlado que
impulsado. Es decir, sabe lo que dice y lo que quiere y va con perseverancia
hacia ello, pero no con pasión, si no manejando su empuje desde la coherencia,
el razonamiento y la sensatez.
Como dato anecdótico, señalar que le gusta
decir la última palabra, ser él quien ponga el punto y final.
Análisis realizado por
Mª Ángeles Arteaga Pinto